PAIS VASCO, España.- Guste o no, la realidad es que en estas elecciones al Parlamento Europeo los resultados electorales obtenidos por la derecha Española, el Partido Popular (PP) gobierno de turno, no han sido los mejores aunque hay quienes alegan lo contrario y como consecuencias su declive o decadencia política solo es cuestión de tiempo.
Ahora bien; todo final tiene un principio, entonces la pregunta sería la siguiente ¿Porque el principio de este posible final? Hay un dicho que dice que las estadísticas en política no se equivocan y a la experiencia me remito.
El alto precio pagado en estás elecciones por parte del (PP), sin duda alguna, se debe a que sus diferentes administraciones siempre han reflejado un alto indice de corrupción, más sus políticas de austeridad extrema que ha provocado un acelerado incremento del desempleo y una inseguridad en los diferentes renglones sociales de España. Tanto así, que la juventud percibe que las posibilidades de conseguir un puesto de trabajo, en estos preciso momentos es prácticamente nula.
Por otra parte; el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), también resibió un fuerte castigo de parte del pueblo con la perdida de dos millones doscientos mil voto por parte de miembros y simpatizantes, unos que se marcharon a formar parte de otros partidos de izquierda y otros que simplemente se abstienen al voto debido a su propia incapacidad de comprender o asimilar los grandes aportes de este partido en materia de salud, educación, inmigración, economía, agricultura, tecnología, entre otros asuntos, en la sociedad española.
Sin duda a equivocarme, soy de opinión que el empuje imparable de los llamados partidos emergentes y tomaré como ejemplo el recién estrenado “PODEMOS”, que dirige Pablo Iglesias, no son casos fortuitos como muchos analistas políticos quieren hacer creer cuando afirman que el buen resultado electoral obtenido por estos se debe a una modalidad-casualidad propia del modelo del siglo XXI. Pues queridos lectores tengo para decirle que nada es menos cierta que esa teoría.
Es de vital importancia que el bípartidismo Español, (PP)-(PESOE), comprenda que la crisis económica mundial pauta nuevas reglas en las sociedades y estas a su vez exigen nuevos métodos en el diario quehacer político de los pueblos.
Hay quienes todavía siguen soñando al creer que Europa ha sido la excepción. En todo caso quien así lo creyere se equivoca. Simplemente basta con leerse unos cuantos periódicos y/o unas cuantas revistas para comprender que los partidos emergentes están avalados por aquellos que dicen no sentirse representados por ningún partido político, por ejemplo las llamadas plataformas sociales.
Al hacer mención a estas plataformas el gran error de la derecha ha sido apelar al diminutivo “ Los FRIKIS de la sociedad Española” menospreciando y olvidando que estos también tienen voz y voto en la sociedad.
Es justo e incuestionable, para bien o para mal, decir que esta sociedad dio un giro en dos dirección política. primero; la ultra-derecha se fortalece debido a que la derecha tradicional, aquella del discurso suave y populista pierde fuerza por su incapacidad en el manejo del Estado Español y segundo; la izquierda radical también se fortalece por lo anteriormente señalado.
Antes de concluir me gustaría preguntarle a la clase obrera y la inmigrante que votó a la derecha tradicional y a la ultra-derecha ¿Que garantías sociales esperan ustedes de una derecha que solo rescata bancos mientras sus ciudadanos hurgan en los contenedores de la basura, que se muestran incapaz de poner en marcha un plan que incentive el empleo para los más jóvenes, pero capaces de inyectar capital del estado a bancos pero no al crédito de las familias más desprotegidas (los pobres), así como a las pequeñas y medianas empresas, de aquellos que para el año que entrante ya tienen en agenda aprobar una reforma fiscal donde se bajarán los sueldos y se subirán los impuestos? ¡Estoy seguro que nada!.