WASHINGTON.- La República Dominicana ratificó ante la Organización de Estados Americanos (OEA) que aplicará «con transparencia, justicia y equidad» el mecanismo de regularización de extranjeros, como lo dispone una reciente sentencia del Tribunal Constitucional de este país caribeño.
La posición dominicana fue fijada ante el organismo hemisférico por el embajador Pedro Vergés, durante su sesión de este jueves.
Indicó que el Gobierno de Danilo Medina es legítimo y respetuoso de la institucionalidad y acatará en todos sus términos dicha sentencia, la cual ha sido emitida por un tribunal que, como el Constitucional, es a su vez, el resultado de un proceso inequívocamente democrático.
Expuso que en la República Dominicana la Comisión Interamericano de los Derechos Humanos (CIDH) tiene “la más absoluta libertad para entrevistarse con quienes desee y cuando lo desee”.
“Desde aquí, y en nombre del gobierno, puedo garantizarles a quienes la compongan las más absoluta libertad para entrevistarse con quienes lo deseen, así como para observar cuantos aspectos de la realidad dominicana les interesen en procura de sacar las conclusiones que estimen necesarias, que abrigo la esperanza de que serán justas y equilibradas”.
Declaró que la República Dominicana espera de sus amigos en la presente tesitura, no una solidaridad ciega e incondicional, sino una que se fundamente en la sosegada ponderación de sus argumentos”.
Vergés habló en momentos en que se anuncia que siete miembros de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH), una entidad dependiente de la OEA, irán a la República Dominicana el 2 de diciembre a reclamar que se suspenda la aplicación del Programa de Regularización de Extranjeros que ha iniciado la Junta Central Electoral (JCE) por mandato del Tribunal Constitucional.
Desde que el Tribunal Constitucional aprobó la polémica sentencia que establece quiénes tienen derecho a la nacionalidad dominicana, grupos de inmigrantes y entidades locales han estado pronunciándose en contra de la misma. Incluso, la CIDH rechazó esa decisión por considerar que despojaría de manera retroactiva de su nacionalidad a miles de dominicanos de ascendencia haitiana.
La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA) encargado de la promoción y protección de los derechos humanos en el continente americano. Está integrada por siete miembros independientes que se desempeñan en forma personal y tiene su sede en Washington, D.C. Fue creada por la OEA en 1959 y, en forma conjunta con la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH), instalada en 1979, es una institución del Sistema Interamericano de protección de los derechos humanos (SIDH).