SANTO DOMINGO (EFE).- El ministro de la Presidencia, Gustavo Montalvo, y el ministro de Relaciones Exteriores, Andrés Navarro, encabezaron hoy la apertura del Segundo Foro de la Diplomacia Dominicana “Multilateralismo y Desarrollo Sostenible: Un compromiso de Nación”, una iniciativa que desarrolla la institución, en el marco de la exitosa y revolucionaria política exterior que impulsa el presidente Danilo Medina.
La inauguración se desarrolló en el salón Jesús María Troncoso del Banco Central, mientras que el resto del foro continuará los días 12 al 13 de este mes en un hotel de Santo Domingo, está dirigido a los embajadores y cónsules generales acreditados en el exterior, con el objetivo de profundizar los conocimientos de los ejes centrales de la diplomacia dominicana, de los objetivos de desarrollo sostenido y la incidencia del país en organismo multilaterales como la CELAC y la OEA, en pos de colocar a la República Dominicana en un reposicionamiento sin precedente en el marco internacional.
El ministro de Relaciones Exteriores, Andrés Navarro, tuvo a su cargo las palabras centrales del acto, en las que destacó la intensa jornada de trabajo de la institución con la aplicación de un plan estratégico de transformación durante el pasado año 2015, por lo que definió como “el año de la reforma de la diplomacia dominicana”.
Precisó que “durante todo 2015 se implementaron los procesos de transformación del quehacer de las relaciones internacionales de nuestro país, y aunque nos tomará varios años más para la concreción de esa nueva política exterior en su verdadera magnitud, lo alcanzado en medio de un contexto internacional adverso, nos permite asegurar que la ruta está bien trazada”.
El funcionario destacó la atmósfera negativa de varios años atrás que tuvo que enfrentar la iniciativa en política exterior del presidente Medina, “con grandes turbulencias y cúmulos de factores internos y externos, condiciones que dan mucho más trascendencia al posicionamiento alcanzado por el país en poco más de un año, con profundos cambios institucionales”.
Expuso que si bien la desolación, incredulidad, escepticismo y las constantes denostaciones se constituyeron en armas amenazantes contra la institución y el propio país, “no obstante podemos decir todos, pese a esas condiciones adversas, experimentamos la mayor cohesión interna del Ministerio de Relaciones Exteriores y, lo que es más, el mayor sentido de nación de la República Dominicana”.
Entre los logros alcanzados subrayó la nueva orientación en materia de política exterior, acompañada de un plan institucional que confirió mayor “direccionalidad” y efectividad al rol del país en medio de ese adverso contexto internacional; una articulación estrecha de la institución con la Agenda Nacional de Desarrollo y las Metas Presidenciales, así como una oportuna y transparente apertura de la diplomacia dominicana con carácter integracionista y abierta al diálogo.