El presidente Donald Trump ordenó el domingo al Departamento de Comercio que ayude a una empresa de telecomunicaciones china a “regresar a los negocios” luego de que el gobierno de estadounidense le impidió acceder a sus proveedores.
Lo que sigue en duda es la decisión del departamento del mes pasado para impedir que ZTE Corp. _un importante proveedor de redes de telecomunicaciones y telefonía con sede en la ciudad de Shenzhen_ importe componentes estadounidenses durante siete años. Estados Unidos acusó a ZTE de engañar a los reguladores estadounidenses tras determinar que violó las sanciones impuestas a Corea del Norte e Irán.
Trump, quien ha tomado una dura postura en cuanto al comercio y tecnología con Beijing, tuiteó el domingo que él y el mandatario chino Xi Jinping están “trabajando juntos para dar a la compañía telefónica china, ZTE, una forma para regresar a los negocios, y que sea rápido. Demasiados empleos se han perdido en China. ¡El Departamento de Comercio ha sido instruido para resolverlo!”.
Trump aseguró que ya se han perdido «demasiados empleos en China» a causa de esta crisis.
ZTE, que en 2017 tuvo una facturación de 108.000 millones de yaunes (16.700 millones de dólares), dijo el miércoles que «las principales actividades del grupo (habían) cesado» tras la decisión estadounidense.
En cabeza en el desarrollo de la tecnología 5G (Internet móvil ultrarápido) en China y con más de 74.000 empleados, ZTE depende de los componentes fabricados en Estados Unidos para sus redes de fibra óptica. El grupo también monta microprocesadores estadounidense y usa el sistema operativo Android en sus teléfonos inteligentes. (I)